Para estudiar bien y poder rendir al máximo sin desarrollar dolores de cabeza ni problemas de fatiga visual es fundamental seleccionar la mejor iluminación posible. En este artículo nuestros expertos en iluminación te cuentan cuál es el mejor tipo de iluminación para estudiar que existe. Sigue leyendo para conocer las mejores alternativas de iluminación que puedes escoger.
Cómo escoger la mejor iluminación para estudiar
Todos los expertos en técnicas de estudio coinciden en la gran importancia de contar con una buena iluminación para rendir mejor en las horas de estudio que dediquemos tanto durante el día como también por las noches. Si bien la mejor iluminación será siempre la luz solar, podemos complementarla con iluminación artificial de calidad para conseguir mejores resultados y para iluminar la zona de estudio en las horas nocturnas en las que tengamos pensado dar un buen empujón al temario. En este caso los expertos recomiendan usar siempre una luz ambiente y después elegir una luz focal mucho más directa para centrarse bien en el estudio con una buena calidad de iluminación.
A la hora de ubicar la luz ésta se debe colocar siempre en el lado contrario a la mano que usamos para escribir para no crear una sombra en los apuntes, ordenador, etc.
En cuanto al tipo de iluminación, luces y lámparas que son más convenientes para estudiar los expertos coinciden en que las luces frías son la mejor alternativa para estudiar junto con las luces neutras. Este tipo de iluminación podemos encontrarla, como nos explican los expertos de LamparaDirecta, en la iluminación, focos y bombillas LED. La luz cálida tiene una tonalidad rojiza o amarilla que no se recomiendan para estudiar ni para leer porque sobrecarga la vista y además suele dar calor. Este tipo de luz se usa más bien para crear climas especiales y generar atmósferas y ambientes únicos en circunstancias originales como los bares o restaurantes nocturnos y los centros de masajes.
La luz fría tiene un tono más hacia los colores blancos y azulados y se usa también para dar efectos fríos a las fotografías. La luz neutra es mucho más equilibrada y se encuentra en el centro de ambas alternativas. Si bien la luz del sol reflejada en las paredes o a través de las cortinas es la mejor opción para estudiar y leer, la luz fría es una buena alternativa a nivel de iluminación artificial, ya que se parece mucho más a la luz natural y por este motivo cansa mucho menos la vista.
Si puedes combinar la luz del sol a través de las cortinas para que no sea tan directa con un foco de luz LED natural o fría sin duda conseguirás crear el ambiente perfecto para obtener un buen rendimiento en los estudios. Algunas pruebas han comprobado el rendimiento de los estudiantes en salas con diferentes niveles y tipos de luz y han concluido que las personas que utilizaron luces frías consiguieron mantener mejor el estado de alerta y por consiguiente lograron mejores resultados sus pruebas.
Ahora bien, los expertos también reseñan que las luces frías utilizadas por la noche pueden llegar a provocar insomnio porque mantienen el cerebro despierto todo el tiempo. De esta manera, para las noches sin duda será mejor elegir un tipo de iluminación LED con luces neutras. No es recomendable utilizar tubos fluorescentes ya que este tipo de iluminación suele cansar la vista y además al parpadear constantemente puede causar problemas de visión y dolores de cabeza. Este tipo de iluminación también suele provocar calor con lo que es fundamental sustituirla siempre que sea posible por tubos LED e iluminación de máxima calidad.
En conclusión, la mejor luz para estudiar es la luz del sol, pero en su defecto será mejor elegir una fuente de luz artificial en tonos naturales o blancos por el día y una lámpara LED o luz focalizada en las mismas tonalidades. Para las noches puede sustituirse este tipo de lámpara fría por luces naturales que no provoquen insomnio ni alteraciones en el sueño normal y en los procesos de descanso de los estudiantes. Antes de usar luces frías por la noche los expertos recomiendan también las luces cálidas, aunque a ser posible la mejor alternativa siempre será la iluminación neutra. En el caso de los niños lo mejor es escoger directamente las luces naturales o frías, ya que no debemos dejar que los pequeños se acostumbren a estudiar por las noches porque deben respetar las horas de sueño para crecer saludables.
Es fundamental revisar todos estos puntos antes de establecer un espacio de estudio ya que sin duda la iluminación adecuada jugará un papel fundamental a la hora de prevenir los problemas de la vista y el cansancio en los ojos, así como también otros problemas serios que pueden derivarse del uso de una iluminación inadecuada, como por ejemplo los dolores de cabeza.