Las historias y leyendas más sorprendentes del póker

El póker es un juego muy especial del que existen muchísimas leyendas. En este artículo hemos recopilado las mejores historias y leyendas más sorprendentes del póker de todos los tiempos. Sigue leyendo para conocer las mejores historias y leyendas sobre póker seleccionadas por nuestros expertos.

La leyenda del niño portugués

Sin duda una de las historias más sorprendentes del póker de todos los tiempos es la historia de un joven portugués denominado «Girah». Este chico de 18 años ha revolucionado el poker online tras ganar dos millones de dólares jugando por Internet. Aunque en un principio su identidad era misteriosa finalmente decidió quitarse la careta virtual para retar a los mejores jugadores del mundo. Más tarde confesó que realmente no es que supiera jugar muy bien sino que cometía fraudes y por eso ganaba tanto dinero jugando al póker.

La historia de Amarillo Slim

Por otro lado encontramos la historia de Amarillo Slim, el mejor apostante de todos los tiempos. Este hombre ya fallecido apostaba y ganaba sobre cualquier cosa: sobre carreras a caballo, sobre ping pong, etc. y ganó las Series Mundiales de Poker en el año 1972, además de conseguir tres brazaletes más hasta 1990.

Demandas a casinos

Otras de las historias más curiosas son las de las demandas a los casinos. Sobre todo destaca la de Harry Kakavas, quién demandó al casino de Melbourne por perder 1500 millones de dólares en catorce meses. Este hombre alegó en su demanda que en el casino no debieron haberle permitido jugar tanto dinero teniendo en cuenta que era un ludópata.

Jugarse a su mujer

Por sorprendente que parezca hay personas que pueden ir más allá de jugarse su dinero e incluso su casa… Un hombre en Nueva Delhi fue acusado de apostar a su mujer en una partida de póker y perder. Por supuesto la víctima logró escapar de los vendedores, pero fue acusado por este tipo de apuesta ilegal ya que su mujer no es de su propiedad y este tipo de acto está penado por la ley.

Las cartas asimétricas

Existen muchos tipos de estafas y en concreto Phil Ivey fue acusado de estafar en el casino de Crockfords unos nueve millones de euros. Lo curioso es que el hombre demandó al casino por no cobrar y el casino alegó que este profesional del póker aprovechó la impresión del reverso de las cartas y el error en el corte para identificar las cartas y conseguir jugar con ventaja. Hasta el momento esta historia todavía no tiene resolución judicial.

La mayor estafa del póker

Si hablamos de póker online el mayor escándalo de todos los tiempos le pertenece a Russ Hamilton, el ganador de las Series Mundiales de 1994. Este hombre fue acusado de estafar más de 20 millones de dólares a los jugadores de la sala Ultimate Bet mediante un software que le permitía jugar como superusuario y ver todas las cartas de sus oponentes. Además de Russ Hamilton los otros implicados en esta estafa también jugaban en una especie de «modo dios». Fue el informático Travis Makar que trabajó para ellos quién sacó a la luz esta estafa.

Un final inesperado

Por supuesto el póker también forma parte del libro de Récord Guiness. En este caso la partida más larga de todos los tiempos hasta 2010 llegó a durar hasta 72 horas sin ningún tipo de pausas y se celebró a bordo de un barco. La partida se interrumpió únicamente porque el ganador tuvo un ataque al corazón en mitad de una jugada y las ganancias fueron entregadas a su viuda.

La partida más larga de todos los tiempos

Más tarde, en el año 2010 Phil Laak superó esta partida de 72 horas jugando durante 115 horas seguidas para imponer el nuevo record del mundo, que le fue reconocido como tal con el Récord Guiness. Más tarde unos jugadores de Nueva Zelanda llegaron a jugar 117 horas seguidas, pero por razones ajenas a su organización el nuevo récord no fue aceptado.

La aparición del sandwich

Por sorprendente que pueda parecer la historia del póker está también ligada a la del sandwich. En el año 1762, tras 24 horas jugando al póker, el conde de Sandwich tenía hambre y para poder comer sin tener que dejar de jugar pidió a sus criadas que le pusieran carne entre dos rebanadas de pan. La historia dice que con el paso del tiempo este tentempié se bautizó como sandwich en honor a su descubridor y en la actualidad este tipo de comida se ha vuelto universal y puede encontrarse en prácticamente cualquier establecimiento de alimentación.