
El Barroco en España fue uno de los periodos en los que la literatura tuvo una importancia increíble, y es por eso que se considera al siglo XVII, que es exactamente cuando llegó a nuestro país este movimiento, el Siglo de Oro, uniéndose en un mismo periodo autores de gran renombre y creándose obras que, como podrás leer a continuación, tuvieron y a día de hoy, todavía tienen, gran importancia en nuestra sociedad, como es el caso de El Quijote, una de las obras magnas de la literatura barroca española.
¿Qué características tiene la literatura barroca española?
Como hemos comentado, el Barroco se originó en el siglo XVII y no solo afecto a la literatura, sino también a la manera de ver el arte en todos sus campos, va bien sea en la pintura, la escultura o incluso en la arquitectura, puesto que dio un cambio drástico en la construcción de lo que anteriormente se creaba, haciendo ver que el Universo es algo que no cuenta con la perfección que, por ejemplo, el Renacimiento buscaba, haciendo que todo cumpliese una serie de normas estéticas. En este movimiento se descubre o se busca destacar que la imperfección también existe y que también puede ser bella, al igual que el desequilibrio entre las estructuras, ya bien sean arquitectónicas como literarias.
Para resaltar estas imperfecciones lo que se emplea en la literatura son los contrastes que hacen ver la cara, pero también la cruz de un mismo hecho, como por ejemplo la vida y la muerte, la cordura y la locura, la felicidad plena y la tristeza. Todo esto también se identifica al crear unos elementos que equilibran la historia, que hacen que dentro de todo este desorden de contrastes, ayuden a dar una especie de equilibrio en la que el lector tenga constancia de que en el mundo, en el Universo pueden convivir perfectamente ambos conceptos tan contrarios.
Cuando se habla de la literatura barroca española, nunca hay que olvidar que uno de los grandes precursores de que llegase a España y que tomase la importancia que tuvo más adelante fue Miguel de Cervantes, puesto que es el que promovió este movimiento, haciendo de puente entre el Renacimiento, el cual había llegado a la península de manera tardía con respecto al resto de países que ya estaban en su madurez, y el Barroco. Fue en este preciso momento cuando escribió su novela más conocida y que ha sido traducida a decenas de idiomas y que a día de hoy, es considerada como una de las obras más leídas y comercializadas de todo el mundo.
Dentro de la literatura barroca española se dan dos tipos o estéticas bien diferenciadas. En primer lugar nos encontramos con una literatura conceptista, es decir que usa una gran cantidad de conceptos que ayudan a que la escritura fuese más rica en paradojas, dobles sentidos que hacían que el lector tuviera que pararse a identificar cada una de las frases y cuál era su significado. Son muchos los estudiosos que nombran a esta literatura del concepto como una escritura inteligente, ya que buscaban el fondo de la literatura más que la propia forma, es decir, se dedicaban más a escribir de manera ingeniosa, rebuscada en algunos conceptos y palabras para que el lector pudiera seguir con su lectura. Uno de los ejemplos que se puede dar es la expresión “Lo bueno, si breve, dos veces bueno”, frase que, como puedes ver, no cuenta con una forma estética elaborada o con palabras bien sonantes, sino que, lo que intenta es elaborar un fondo que haga pensar al que lo lee y sepa identificar a qué quiere referirse.
El otro estilo de la literatura barroca en España era el culteranismo o también denominado en algunos sectores como gongorismo, ya que uno de sus precursores fue Luis de Góngora, un poeta que buscaba engalanar todas sus obras con unas métricas bien sonantes, de gran calidad y belleza, confiriéndole al texto palabras que pudieran sonar bien y ser consideradas arte, ya que deseaba, a diferencia del conceptismo, que la forma fuese mucho más estética y que pudiera considerarse más sensorial o emocional. Existen muchas obras del culteranismo en el que la persona, puede cerrar los ojos y sentir cada una de las palabras y las sensaciones o emociones que quiere transmitir. Por lo tanto, el objetivo principal era hacer sentir al lector, hacer que, con la lectura de una de sus obras o poesías, pudiera sentir ternura, amor, tristeza, o incluso llegar a sentir el estar en medio del campo rodeado de flores con la fragancia que estas desprenden. Como se puede ver, es contrario al anterior tipo, que quería el uso de la literatura para hacer pensar.
Autores principales de la literatura barroca española
Cabe destacar que en esta época tan prolífica de la literatura española, no solo se escribió novelas o escritos en prosa, sino que también tuvieron gran importancia la poesía y por supuesto, el teatro, y en este bloque queremos hablarte de algunos de los autores y sus obras del Barroco español más famosos.
Lope de Vega
Hablar de Lope de Vega es hacerlo de uno de los mayores escritores de la literatura de nuestro país, puesto que, a pesar de ser conocido principalmente por sus obras teatrales, en las que destaca sin dudar Fuenteovejuna o La dama boba, también escribió muchas novelas y poesías.
Miguel de Cervantes
Cuando se menciona a Cervantes, nos viene a la cabeza Don Quijote de la Mancha, una obra que se encuentra dentro de la literatura universal junto con otros autores tan reconocidos como Shakespeare. A pesar de esto, no solo escribió la historia del ingenioso hidalgo, sino que también nos dio otras novelas recogidas en sus “Novelas ejemplares” o en “La Galatea”.
Francisco de Quevedo
Aunque, como ocurrió con el resto de autores españoles, sus obras fueron muy variadas, destacó principalmente por sus poemas, ya que cuenta con una gran variedad de temas, desde los amorosos, hasta los sátiros o los heroicos.
Luis de Góngora
Otro de los grandes referentes fue Góngora. Uno de los datos curiosos es que nunca llegó a publicar ninguna de sus obras ni poemas, sin embargo, una vez falleció, sus manuscritos fueron transcritos y es gracias a esta acción que podemos disfrutar de sus obras y su multitud de poemas.